Diplomacia ambiental
Partiendo de una realidad geopolítica innegable que las fronteras nacionales y las fronteras de los ecosistemas casi nunca coinciden; la necesidad de relacionarse y lograr acuerdos entre Estados a los fines de la adecuada gestión ambiental regional y global lleva al establecimiento de acciones de diplomacia o relaciones de carácter medioambiental. El objetivo de la diplomacia ambiental (DA) es alcanzar acuerdos de buena voluntad mutua o cooperación, mediante tratados, convenios o convenciones [1] que fundamentalmente establezcan reglas claras de uso o empleo, mecanismos no violentos o alternativos de resolución de conflictos y restablezcan o mantengan la paz. Existen dos espacios donde lograr tratados, en reuniones bilaterales y en cumbres o conferencias. La diferencia entre estas dos últimas figuras es la asistencia o no de los jefes de Estado o gobierno versus la de representantes plenipotenciarios. Las acciones diplomáticas ambientales ocurren en todos los planos de l